Después de lo que pareció una eternidad caminando entre meteoritos caídos llegamos a su casa, todos estaban a salvo, asustados ya que las noticias lo habían retransmitido todo, pero al vernos y explicarles todo se sintieron aliviados y a la vez tristes aun que no conocían en exceso a mis padres. Recordarlo me provocaba una leve punzada de dolor en el pecho, era soportable.
Después de comer y beber durante un rato empezamos a escuchar ruidos extraños que nos recordaban sonidos metálicos y electrónicos, eran fuertes y variables, miramos por la ventana y vimos gigantes de hierro andando y destruyendo todo, con cada paso notabamos un leve temblor de tierra, vimos fuego saliendo de sus fauces lobunas y garras destructoras que iban arrasando con todo, el temor que habíamos sentido hacia escasas horas no era comparable a esto.
Nos hicimos una pregunta.
Que haríamos ahora?
Solo tenía una respuesta.
Sobrevivir.
jueves, 7 de mayo de 2015
196'
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